CULTURA SECHÍN 

Por: José Santos Gamarra Soto

Ubicado en el valle de Sechín, costado del río Sechín y en las faldas del cerro Sechín se encuentra el importante complejo arqueológico de Sechín perteneciente a la cultura del mismo nombre, se cree con una antigüedad de 3600 a.C., nuestra llegada a ese complejo arqueológico sucedió con un calor fortísimo del mediodía que ni siquiera los guarangos o algarrobos nos dieron sombra, sin embargo, habíamos llegado con la inquietud de conocer más a esta reliquia que fuera descubierta por el arqueólogo Julio C. Tello en el año de 1937, considerada como uno de los descubrimientos más antiguos en América, está ubicado a 375 Km., de Lima, perteneciente a la provincia de Casma, departamento de Ancash, en la costa peruana.

Sechín, es uno de los desiertos más secos que hayamos podido visitar hasta la actualidad, el calor es asfixiante porque está desprovisto de vegetación, según nuestro guía llamado Melquiades, existen muy cerca otros complejos más pequeños de ruinas arqueológicas llamado Sechín Bajo y Sechín Alto, mientras que Chankillo y Mojeque se encuentran en el valle del río Casma. La cultura Sechín está demostrado que es más antigua que la Cultura Chavín, a Sechín se podría considerar en antigüedad paralelo a la época de la Cultura Caral. Según la historia en la costa del Perú algunos de los primeros asentamientos estaban en la costa del desierto y dependían de la pesca en lugar de la agricultura o la caza y la recolección para subsistir.

Esta cultura se caracteriza por su edificio principal o central hecho de piedra, dentro de ella existe otro edificio o estructura de adobes cónicos, al descubrirse esta cultura el sabio Julio C. Tello tuvo que replantear su teoría de que Chavín era la cultura matriz de la civilización andina en nuestro país. Exploró el cerro Sechín y descubrió varios vestigios arqueológicos, le llamó la atención la existencia de un monolito que lleva esculpida la figura de una especie de guerrero cuyo rostro exhibe sus dientes y el cabello ondulante. Con la ayuda de varios obreros Tello excavó la zona cubierta de tierra y descubrió la existencia de varios monolitos que estaban semienterrados, luego hallaron más estelas que conformaban un muro perimétrico dentro del cual se desentrañó la existencia de varias estructuras de adobe con paredes en las que destacan figuras coloridas de apariencia mitológica.

El edificio principal es rectangular con esquinas ovaladas o redondeadas, existen estelas grabadas como el que se acompaña las fotografías que se pudo tomar. Los personajes en los monolitos de las fachadas son de guerreros-sacerdotes quienes tienen un cetro o arma y las víctimas descuartizadas o sus despojos como cabezas, extremidades, ojos ensartados, vértebras, intestinos y vísceras, creando una escena macabra. No existe la presencia de semidioses o animales, lo que si pudimos apreciar es que todas estas figuras representan a humanos. Al edifico interior construido con adobes no pudimos entrar porque el guía nos manifestó su prohibición, y que es la decoración principal mejor conservada que representan a peces mitológicos labrada sobre la pared de barro húmedo.

Con la satisfacción de haber visitado uno de los lugares que siempre nos llamó mucho la atención desde hace 40 años en que visitamos por vez primera, nos dirigimos hacia el norte, esta vez nos esperaba el balneario de Tortugas muy cerca de Chimbote, donde fue muy grato el chapuzón por el ardiente sol norteño de esa hora, balneario que nos gustó mucho por su ubicación y el agua azul turquesa que posee dicho balneario…