sábado, 27 de septiembre de 2014

LOS MERCACHIFLES…..EN MARCA, HICIERON HISTORIA POR MUCHOS AÑOS DESDE LA ÉPOCA COLONIAL, LLEGABAN DESDE FINES DE JULIO DE CADA AÑO, ANTES DE LA FIESTA PATRONAL DEL 10 DE AGOSTO, A VECES CAMINABAN POR LAS CALLES GRITANDO, PERO LOS MÁS HACÍAN SUS TIENDAS EN LA PLAZA DE ARMAS  Y  PLAZUELA ANTES DE LA CONSTRUCCIÓN  DEL OBELISCO DE 1959...

                      LOS   MERCACHIFLES

                                      Por José Santos Gamarra Soto (Dolton)
                                                                                                         
Comerciantes trashumantes, vendedores ambulantes, caminantes y promotores de ventas de todo tipo de prendas y baratijas, antes y durante las fiestas patronales. Llamàbase así a los mercachifles que provenían desde la época colonial. En Marca, se aparecían cual saltimbanquis modernos a finales de Julio de cada año, eran promotores del intercambio cultural de la costa, sierra y selva peruana en la antesala del 10 de agosto, fecha en que Marca se viste de gala al celebrar jubilosa su fiesta patronal, en honor a su patrón, el mártir San Lorenzo, fiesta jubilar que dura seis días, del ocho al trece de agosto, a donde convergen personalidades de toda condición, gente de diferentes lugares del Perú y del mundo, marquinos residentes en Lima, provincias y el extranjero, que retornan para confundirse en el anhelado calor de la tierra generosa de sus ancestros.

Los mercachifles, provenían  en su mayoría de Celendín, llamados “Shilicos” eran los que vendían sombreros de ahí la frase “Los shilicos están vendiendo sombreros hasta en la luna”, existían también mercachifles Recuainos, Huaracinos, Huachanos y Selváticos que llegaban con mucha anticipación a la fiesta ofreciendo lo último de la moda, en cierta oportunidad escuché a un niño de mi edad, decir a su mamá:
-          Oye mamá, ha llegado un gringo bien negro a la ciudad.
-          ¿Quién es, ese gringo bien negro? – le contestó su mamá.
Lo que pasaba era que había llegado un mercachifle de tez morena y en Marca era costumbre llamar gringo a todo visitante.

Por los años 50 del siglo pasado, recorría junto a mi madre las “Tiendas” de los mercachifles, quienes exhibían en la plaza de armas ò en la plazuela lo último en vestidos, zapatos, sombreros y otros productos para la ocasión, tenían sus tiendas con toldos de lona y yute que cubrían algunas calles y plazuelas, algunos mercachifles de Cerro de Pasco llamados “Cerreños” traían sus tintes de muy buena calidad de variados colores para las bayetas y tejidos en crudo como las "sayas" de las damas y pantalones de lana para varones hecho en el telar de los tejedores que existían en buena cantidad. Otros, traían una “máquina” de películas, especie de cámara fotográfica, para ver en cada “clic” los rostros de los actores y actrices más famosos del momento en el que sobresalían Joselito, Pulgarcito, Marisol, Sarita Montiel y Rocío Durcal  entre los españoles, mientras que entre los mexicanos sobresalían Jorge Negrete, Sara García, Lucha Villa, Luis y Antonio Aguilar, Pedro Infante y Javier Solís.
                                       Organillero y mono capuchino

Junto a éstos mercachifles llegaba un mono capuchino y su organillo suspendido en dos maderas a cierta altura de la que sobresalía una canción melodiosa que al terminar la canción el mono abría la tapa del organillo y sacaba un papelito doblado en cuatro partes, era la suerte que le tocaba al parroquiano quien había pagado diez centavos para que le “Adivinen la suerte”, en el papelito le indicaba la suerte y/ò el porvenir que le tocaría en el futuro, en el amor, en el trabajo, en el negocio y otras charlatanerías más, esto era el fiel reflejo y nostálgico de la cultura y sociedad del siglo pasado, desde el siglo XIX. Existían  otros juegos como las ruletas aéreas y horizontales por donde saltan y corren los dados: “la chica y la grande”. Escopetas de aire comprimido para balines y plumillas rojas, verdes, azules y amarillos cuyo acierto en los tiros era como sacarse la lotería por lo difícil de acertar en los tiros:
    ¡¡Falta puntería!!.......Decía el mercachifle luego de recibir los S/. 0.10 del juego.

Vendían aceite y grasa de culebras y boas selváticas traído por algún “chuncho”, éste personaje de la selva tenía cebo de culebra para el reumatismo, artritis, gastritis  y otras enfermedades bronquiales, sangre de grado para las úlceras estomacales, el cual, era corteza de árbol de color rojo que los traían enrollados, pieles de reptil, de boas y shushupes selváticos, collares de huairuros para usar como amuletos, etc.

                              La rueda o ruleta de la fortuna

“La ruleta de la fortuna”, se le llamaba así a un juego de la costa, la voz del mercachifle recuerdo hasta la actualidad, le daba varias vueltas al aparato, eran unos aparatos que actualmente existen en los casinos modernos de las Vegas. Donde apuntaba la manecilla del marcador era el que ganaba el premio. La manecilla era parecido a la del reloj, generalmente la  manecilla se detenía donde no había premios, casi siempre el apostador era el perdedor, para dar cierta solemnidad y prestancia al juego, el mercachifle luego de dar varias vueltas con mucha fuerza al aparato, saltaba y gritaba:
       -   “’¡pasa sol……..!”,     “¡pasa luna………!”,
       -   “¡ancla paga…….!”,    y el marcador siempre quedaba suspendido donde no
                                          Había premio.  
       -   “¡……….La casa gana”!, se apresuraba a decir el mercachifle.

Habían otros juegos, la del cigarrillo y las gaseosas, en un cuadrilátero cercado en el piso como el ring de boxeo, el apostador con 10 centavos adquiría 5 argollas pequeñas de metal, el juego consistía en ensartar en el cuello de las botellas de gaseosas de concordia, triple kola ò chavín kola originarias de Barranca a una distancia de tres o cuatro metros;  con tan mala suerte que no ensartaba ninguno. Para los cigarrillos, las argollas eran de mayor tamaño, argollas de madera que por el mismo precio entregaban 5 argollas las que al tirarlas no ingresaban en la cajetilla de cigarrillos que eran el Chesterfield, Ducal o Chalán los cuales tenían que ingresar en su totalidad. Los premios eran muy, pero muy difíciles de ganar, logrando el apostador en muy raras oportunidades ganar algún premio, quien al ganarlos festejaba la hazaña junto al mercachifle como una proeza alcanzada.

En Marca y otros pueblos andinos, sus pobladores lucen lo mejor de su vestimenta en las fiestas patronales y que mejor si son nuevos. Mi madre, doña Elpidia junto a mi padre habían vendido un toro y el dinero era para comprar ropa nueva de los mercachifles para toda la familia, ella se encargaría de ello, aquel año, me compraron un overol vaquero con tirantes de tela gruesa “Tiene que durarte todo el año”-decía mi madre-los tirantes del overol tenían botones remachados de cobre con dibujos en alto relieve, los bolsillos del pantalón igualmente los tenía con remaches de metal, estos overoles estaban de moda, se confeccionaban con la patente de los pantalones vaqueros Levi’s salido en los EE.UU de Norteamérica en el siglo diecinueve allá por el año de 1872. Los overoles estaban hechos de tela gruesa para el trabajo en el campo, complementaba al overol una camisa Caqui de color ocre semioscuro ó de cuadros tambien de una tela muy gruesa, botines negros, y un sombrero de fieltro de color azul marino.

Llegamos a la casa, mi madre guardó todo lo comprado en el mercachifle en un baúl muy grande que teníamos para las cosas mas importantes de la familia, prometiéndome que me pondría esa ropa nueva días mas tarde, en la fiesta patronal de Marca. En efecto, el 10 de Agosto muy temprano aparecía luciendo mi atuendo para festejar la fiesta patronal de Marca. Esta fiesta, que a la fecha no ha perdido su peculiar virtualidad y se mantiene vigente gracias a su acendrada identidad y el prestigio que ha adquirido a través del tiempo...
Fuente: "Historia de Ivo" Autor: José Santos Gamarra Soto.
                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                           

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